Si hay un leitmotiv en la blogesferaes el de las listas. Se hacen listas de todo: libros recomendados, regalos para freaks, películas que debes ver antes de morir, etc.
A mí, personalmente, no me entusiasman, pero hoy se me ha ocurrido una. No es muy original, pero antes la falta de cosas que hacer, ya sabéis.
Lo que decía, estaba viendo American Beauty (Sam Mendes, 1999) y, pensando en lo buen actor que es Kevin Spacey, se me ha ocurrido, una simple lista de, desde mi punto de vista, mejores actores actuales que hay. Pero, cómo seguro que me he dejado a algún gran actor que, simplemente, no me gusta en demasía, la he cambiado por:
Los cinco actores por los que mataría por trabajar:
- Robert Downey Jr.
Sin duda alguna. Desde mi punto de vista el mejor actor estadounidense que hay en este momento. Tuvo sus problemas, pero tras su recuperación ha llegado con más fuerza. Es un actor que sabe sacar el máximo de sus personajes, tan variopintos como Tony Stark en Iron man (Jon Fevreau, 2008), Steve Lopez en The Soloist (Joe Wright, 2009) y el gran Paul Avery de Zodiac (David Fincher, 2007) - Luis Tosar:
Pues sí, puede que os sorprenda, pero en la segunda posición en mi lista está un actor español. Un actor como la copa de un pino. Luís Tosar. Me parece uno de los mejores actores que he visto en mucho tiempo y, además, me gusta que quiera trabajar en España. El otro día, promocionando 18 comidas en Buenafuente dijo una frase que me gustó mucho. A la pregunta de ¿por qué no había ido a Hollywood? Respondió serenamente que no veía la necesidad. Simplemente me encantó. Orgulloso de dónde es y el cine que hace. Aunque no me extraña, haciendo papelones como los de También la lluvia (Icíar Bollaín, 2010), Celda 211 (Daniel Monzón, 2009) o Los lunes al Sol (Fernando León de Aranoa, 2001), yo también lo estaría. - Ricardo Darín
Otro actor de habla hispana, aunque imagino que éste no sorprenderá tanto. Y, es que, Darín es un mago del cine. Todo personaje que toca lo convierte en oro. Solamente poner su rostro al personaje da una nueva dimensión a éste.
Lógicamente, a él también le preceden grandes actuaciones, una en una reciente película galardonada en los «grandes premios» Oscars (un día hablaré sobre los Oscars y me quedaré a gusto con el despacho). El secreto de sus ojos (Juan José Campanella, 2009), Carancho (Pablo Trapero, 2010) o El hijo de la novia (Juan José Campanella, 2001) - Daniel Day-Lewis
Y en estos dos últimos actores nos vamos a las islas británicas. El primero es inglés: Daniel Day-Lewis. Estoy seguro de que si a alguien le preguntasen cuál es el mejor actor británico que conoce Day-Lewis no sería el primero que se le viniese a la mente, pero yo no lo dudaría. Lo que me gusta de un actor no es sólo que sean buenos, también sus decisiones en proyectos a realizar y su capacidad de interpretar dos personajes opuestos de manera magnífica. Esto, lo tiene Day-Lewis. Sino, ved The last the Mohicans (Michael Mann, i999), In the name of the father (Jim Sheridan, 1993) y Gangs of New York (Martin Scorsese, 2002) y me decís. - Ewan McGregor
¿Ewan McGregor? ¿En serio? Pues sí, me parece un magnifico actor también. Tengo una predilección por él desde hace muchos años y, a lo mejor eso es lo que me hace que esté aquí, pero creo que también se lo merece. Es capaz de interpretar a la perfección a un yonki de Edimburgo de los años 90, a un personaje tan extraño como el de Big Fish (Tim Burton, 2003), a un padawan de un universo de fantasía, un ghost writer o un malvado sacerdote que salta de aviones en paracaídas.
De una manera u otra, sabes que si le pones en tu personaje lo va a clavar. Va a darle una capacidad que otro no puede. Y eso, siempre es bueno.
Y hasta aquí llega mi primera lista bloguera. Veréis que he sido bastante internacional: un americano, un español, un argentino, un inglés y un escocés.
Puede parecer una lista un poco chorrada, pero lo dicho, así he tenido durante 30 minutos algo que hacer.
pd: Para quienes hayan visto American Beauty. Esta película es la mayor prueba de que para poder vivir has de ser un capullo. Si Spacey se hubiera tirado a la rubia, hubiese sido un cabrón, pero se hubiese demostrado que no era gay, por lo que habría sido un cabrón pero con la cabeza aún intacto.
Eso es todo.